En las elecciones del 5 de febrero de 2023, los miembros de las juntas receptoras del voto (MJRV) tendrán una dura jornada porque procesarán los resultados de ocho papeletas: prefectos, alcaldes, concejales y vocales de juntas parroquiales; las tres del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS); y la del referéndum planteado por el Gobierno.Es decir, sería una tarea de 16 horas.

En cada junta habrá cinco miembros, organizados en dos grupos. El primer grupo estará integrado por el presidente y un vocal, quienes se encargarán de escrutar los votos de la urna blanca, es decir, prefectos, alcaldes, concejales y vocales de juntas parroquiales. Mientras que el segundo grupo, integrado por el secretario y dos vocales, escrutará las papeletas del referéndum y las tres del CPCCS, contenidas en la urna café.

Si alguno de los integrantes, luego de instalarse la junta, abandona el sitio, puede generarse una multa desde once hasta veinte salarios básicos unificados, es decir, de $ 4.950 a $ 9.000.

Además, existe una multa de $ 45 para quienes no se capaciten y de $ 67,50 a los que no integren la junta. Aquí puede ver el listado de los puntos para capacitarse.

Por esta jornada, los MJRV recibirán una compensación de $ 40, que se prevé sea cancelada en marzo de 2023, según el consejero José Cabrera.

Fuente: Radio Dinámica

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